sábado, 18 de agosto de 2012

Colombia fantástica, absurda, terrible.3.


 
Colombia fantástica, absurda, terrible:

Punto de vista de una extranjera.
  • Los choferes de bus manejan, reciben plata, hablan por celular, saludan otro chofer, cambia la página del periódico plegado en la silla del pasajero… y todo eso con dos manos.

  • En público, no se puede criticar nada, ni el país, ni la sociedad, ni el Estado…sería como escupir a la mamá…
  • Un grupo de la policía canta ranchera y música romántica un día de amor y amistad en la Séptima.
 
  • Los saludos no tiene fin: hola, que más, q’hubo, que has hecho, qué tal de tu vida,comó te fue…
  • La cuantidad de gente uniformada: niñeras, militares, mensajeros, enfermeras, policías, porteros, peluqueros…
  • En las caminatas organizadas, los participantes abrazan los árboles y ¡cuidado! no se les puede arrancar ni una hoja. Mientras tanto, de pronto están torturando gente del otro lado del país pero eso no tiene nada que ver uno con el otro, perdón.

  • Siempre se me cola una viejita con collar de perlas y finge no verme.
  • Comer caldo de costilla en la costa con 40 grados a la sombra y 80 por ciento de humedad.

  • No tenía ni una sola carie pero aquí el odontólogo me dijo que tenía 14. El arquitecto me entrego una casa con tomas de internet sin cables, tina sin agua…

  • Los vecinos del edificio me dicen que estamos entre gente de bien y que no voy a encontrar ningún indio en el ascensor.

  • Pagar un peaje costoso y descubrir una carretera de un solo carril con huecos, Renault 4 sin luces tratando de pasar un tracto mula, moto con tres pasajeros,cicla, burro, zorra, peatones…

  • Un juego de apuesta con un cuy se presenta en el andén de la Séptima los domingos. El animalito está parado y frente a él se encuentran diferentes baldes al revés con hueco y numero. El público pone monedas sobre los números. A la señal del domador, la rata se lanza a toda velocidad y se entra en un balde que le sirve de abrigo. A veces, el suspenso llega a su colmo cuando el cuy se encuentra una hoja en el camino y se pone a comer. El ambiente se calienta y parece la barra brava del Campin. En fin, si se entra en el balde que usted había escogido, ¡usted gana EL FABULOSO BALOTO PASTUSO!, o sea quinientos pesos.
  • En las clases de yoga, hay que abrir su ano para que entre el arco iris que nos va a conectar con la tierra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario